COLECCIÓN DE MENSAJES (161-180 )

CLXI - La Señora manda un pensamiento de Lucía para todos ustedes, dicho ayer por ella misma mientras meditaba. En el nombre del Padre y... Cuando yo le ví las espinas a Nuestro Señora, el corazón me comenzó a latir muy rápidamente. Sentí algo que parecía melancolía. Francisca y Jacinta, cuando vieron el infierno conmigo se pusieron a hacer sacrificios y penitencia porque querían salvar muchas almas y no querían que el demonio se las llevara todas. Más bien, ellos querían rescatarlas todas. Que no se les pase ni una; mas; muchos hombres infieles siguen ofendiendo al Señor y no respetan siquiera el día domingo. Hay muchos que ese día lo usan para ir a fiestas y se olvidan del Todopoderoso. Si todos supieran como Nuestra Señora nos suplicó el rezar el Rosario diariamente y nos enseño la eficacia que tiene éste, todos los días se rezaría el Santo Rosario. Por esto dejó también establecida la devoción al Inmaculado Corazón. Cuánto me duele por eso mi alma está triste, porque muchas almas van a la perdición. Pero sé que no fue inútil el sacrificio de Jacinta y Francisco para ayudar a salvar almas y para reparar las ofensas al Inmaculado Corazón de María y al Corazón de Jesús. Cuánto anhelo que todo el mundo supiese lo que yo sentí en la cueva junto a Jacinta y Francisco.

CLXII - Vosotros sabéis cuando va a oscurecer, también vosotros sabéis cuando va a llover. ¿Por qué no os dáis cuenta cuando va a venir el Señor?

CLXIII - Mi Hijo está por llegar, cambiad de vida.

CLXIV - No tengáis miedo de la segunda venida del Señor.

CLXV Mensaje para todos los misioneros: - Muchos se hacen llamar misioneros y no lo son, muchos no sirven para misioneros, hay discordia y yo vengo a buscar la paz, hay odio y yo vengo a buscar la paz. El odio es causante de mucha destrucción. Salid, salid de vuestros hogares y proclamad la palabra de Dios. Proclamad la venida del Mesías, la venida de mi Hijo en su gloria y majestad. Salid, salid por todo el mundo a misionar. Haced como otros que ya han viajado y llevan la bendición del Señor porque la bendición del Señor es lo único que puede ayudar.

CLXVI - No digáis que falta mucho para la segunda venida del Señor sino decid: Ya está la venida del Señor y proclamad por todo el mundo que ha de venir el Mesías en gloria y majestad. Y no tengáis vosotros la idea que falta mucho, porque aquél que dice: falta demasiado para la venida del Señor, se le harán cortos los días y para él llegará la venida del Señor y lo encontrará con el alma muerta.

CLXVII - Prepararse mucho. Mi Hijo está por venir. Está muy cerca.

CLXVIII - Es la hora de la bendición. Pedid con fuerza al Padre Eterno porque todo lo prometido se cumplirá al pie de la letra. De a poco, a su debido tiempo pero se cumplirá. Por sus frutos los váis a conocer.

CLXIX - Habrá una gran persecución a todos los verdaderos cristianos. Habrá odio. A muchos los llevarán a la cárcel. No neguéis nunca, porque el tiempo de los tiempos está muy cerca y la venida de mi Hijo está muy próxima, para venir a juzgar a los vivos y a los muertos.

CLXX - Muchos dirán: mirad, mirad las maravillas que se hacen; pero no tenéis en vuestro corazón la paz y el amor que deberíais tener. Hay mucho odio y nadie respeta a sus semejantes. No crucifiquéis de nuevo a Nuestro Señor que demasiado se le ha ofendido. El mundo está pasando por una horrorosa crisis. Este mensaje que va ha ser dicho hoy hay que darlo a conocer antes del 8 de diciembre de 1984. Debéis encomendaros a Dios porque muchas almas se pierden. Tendréis que consagraros al Corazón Inmaculado de la Encarnación del Hijo de Dios. Muchos obispos están llevando por el mal camino a muchos. Obedeced, pero no seáis como ellos. El mensaje que se dio a Catalina Labouré se cumplirá. Viajaré triunfal por toda la faz de la tierra. Con Fátima ya se cumplió y aquí, con Peñablanca, se cumplirá. Bebéis amaros mutuamente como el Señor os pide. Si el mundo no accede y siguen las ofensas a Nuestro Señor, vendrá un castigo. Muchos se dirán: Solamente trae castigos. De cierto os digo que han de cumplirse todas las profecías que mi Hijo ha dejado en las revelaciones. Mucha penitencia y hacer sacrificios porque ha llegado la salvación. Si aman a mi Hijo, como muchos dicen, y si me aman, dad el saludo de la paz al enemigo. Pobres y ricos darse el saludo de la paz, todos. Viene de parte de Dios. Quien no da el saludo de la paz no está con Dios porque no ama al prójimo. Todos darse el saludo de la paz. Sois muy pocos los que estáis aquí hoy. Con todo vuestro corazón adorad a Dios; que se hinquen, que toda rodilla se doble al nombre de Jesucristo. Adorad a Dios y proclamad que es el Señor el único Dios y el Dios verdadero. Leed San Marcos XII 7-17. Meditad bien porque aquí hay un gran mensaje.

CLXXI Jesús: - Padre, no me envíes ahora a juzgar el mundo porque si así lo hicieras, serían muchos los que se condenarían.

CLXXII Jesús: - Por lo menos ¡Sálvense ustedes!

CLXXIII Jesús: - A los tibios Yo los vomito, dice el Señor.

CLXXIV Jesús: - Padre, dale una oportunidad al mundo porque si voy, serían muchos los que se pierdan. He mandado a mi Madre y no acceden, pero sí creen en el anticristo. En las cosas tuyas no creen, tampoco creen que mi Madre trae el mensaje.

CLXXV - El Santo Padre sufrirá mucho porque muchos se sentarán en la bestia color escarlata. Como saben, color escarlata, color carne roja, es el comunismo y muchos sacerdotes se están vendiendo y así están prostituyendo a la Madre Iglesia. Se están alejando y una parte de ellos será la gran ramera. No toda la Iglesia Por eso se dice: Dios sacará a algunas almas para que no se manchen con las demás y castigará a la ramera. Muchos sacerdotes quieren que la Iglesia de Jesús vaya a la perdición, vendiéndose al comunismo. Rezad mucho, orad mucho, haced sacrificios. Por eso son las lágrimas de Vuestra Señora porque muchos no quieren obedecer, quieren tapar la boca a quien dice la verdad. Son fariseos y quieren dejar en ridículo todo lo que viene en nombre del Señor. Bienaventurados los que llevan la palabra de Dios y son perseguidos por ella. Levante la mano quien quiera seguir la verdadera Iglesia; unirse al Santo Padre. Ser misionero. Proclamar a Cristo y no rechazarlo. Para la próxima aparición: todos de blanco, con la bandera del Santo Padre. Rosas. Una vela y un crucifijo. Ellos serán besados para que el Espíritu Santo ayude a proclamar la palabra de Cristo y pedirle a EL para que no caigan en la tentación porque ha llegado la hora de luchar contra Satanás. Se ha dicho también que vendrá la persecución dentro de la Iglesia hacia afuera. Esto ya se ha visto.

CLXXVI - No estoy aquí para amenazaros ni tampoco quiero que le tengáis miedo a Dios. Hay que tenerle temor para no ofenderlo. No habléis de Dios lo que no es. No enseñéis a vuestros hijos que Dios va a castigarlos porque hacen algunas cosas pequeñas. ¡Ay! de aquellos padres que les dicen a sus hijos: Dios te va ha castigar porque estás mintiendo; o, Dios te va a castigar porque rompiste la revista. Pero, sí, Dios castigará a la humanidad por las blasfemias y ofensas que se hacen al cielo.

CLXXVII - El mensaje que se va ha decir se ha dicho en La Salette y también aquí. Muchos lo han conocido y muchos al principio se escandalizaron. Hoy se dirá mas profundo porque no quieren entender. ¿No habéis cuando el otoño arroja sus hojas porque éstas no sirven? Aquéllas que no sirven ya no se pueden volver a pegar en el árbol. A veces se queman. Así será el gran juicio a la humanidad. En La Salette te he dicho estas palabras: - Los sacerdotes, ministros de mi Hijo, hijitos míos, por su impiedad y su irreverencia en celebrar los Santos Misterios, por su amor al dinero, al honor y a los placeres se han convertido en cloacas de impurezas. Sí, claman venganza y la venganza está suspendida sobre sus cabezas. ¡Maldición a los sacerdotes y a las personas consagradas a Dios que con sus infidelidades y su mala vida crucifican de nuevo a Nuestro Señor! El clero está aumentando sus cloacas y piden venganza porque la venganza está sujeta sobre sus cabezas, porque ya no hay muchos sacerdotes que pueden tomar el pan con sus manos, porque las tienen sucias, muy sucias. Que un niño de diez años sí lo podría tomar, pero aquél no lo podrá tomar. Si el niño estuviese consagrado a Dios y hubiese sido sacerdote, lo hubiera podido tomar, pero aquél no lo podrá tomar. Tan inmunda tiene la mente y las manos que no se da cuenta que está ahí Cristo vivo, porque muchos parecen boca de víboras, y muchos se están alejando de la Iglesia con otros fines y han utilizado a Cristo mi Hijo, para hablar y ofenderlo con palabras que no salen en el evangelio. La gran bestia y su escudo escarlata quieren llevar al abismo a la Iglesia, pero la Iglesia de Cristo triunfará sobre ellos porque tienen un signo y aquel signo lo usan para reconocerse. Orad por ellos porque muchos van por el camino de la perdición y con ellos llevan muchas almas hacia el abismo. El abismo se ensancha y muchas almas caen en el infierno. ¡Desventurados los habitantes de la tierra! porque Dios va a agotar su cólera y nadie podrá sustraerse de tantos malos reunidos. Esta profecía se cumplió por la primera guerra, por la segunda guerra mundial y ahora nuevamente se pone en práctica, porque: ¡Desventurados los habitantes de la tierra! Dios agotará su cólera y nadie podrá sustraerse de tantos malos reunidos. Las ofensas a Dios y las blasfemias llegan al cielo y piden venganza, pero está la Llena de Gracia rogando y pidiendo a su Hijo. Ella ya no puede sostener la mano de su Hijo porque ya la ha soltado. Ella, con sus ruegos, le pide a su Hijo que le dé otra oportunidad a la humanidad. La humanidad ingrata no quiere aceptarla, sigue ofendiendo a Dios más que antes, mucho más. (Miguel Angel se tapa la cara con el brazo: ¿Cuántas de esas van a explotar?) Orad mucho y amaos mutuamente porque en este preciso momento Satanás trata de hacer luchar a los cristianos. Llegará el día en que se digan estas palabras: Tendrás que negar a Cristo para seguir vivo. Muchos aceptarán aunque ahora digan no. Por eso, estad preparados para ese día porque llegará la persecución y también vendrá la persecución dentro de la Iglesia. Aquí en Chile, esa persecución será más fuerte que en todos los otros continentes porque no quieren entender los mensajes que Jesús dijo en el Evangelio, ni tampoco los de Vuestra Madre.

CLXXVIII - Los científicos harán una gran bomba y Satanás está con ellos. Si la humanidad no se atiene a mis mensajes y ora, va a venir el gran castigo porque los hombres cada día lo están buscando. Esta profecía ya se cumplió porque los científicos ya han hecho una gran arma más poderosa que lo que jamás han visto vuestros ojos. Para que estéis alertas y rezando todos los días Nuestra Señora dice esto: Rusia será el azote del mundo. Rusia hoy (4 de noviembre de 1984) ha hecho detonar una bomba atómica subterránea. Las vibraciones llegarán aquí al continente; serán la causa de terremotos en varios lugares del mundo. Estas son las prácticas que están dejando muchas, muchas calamidades en el mundo. La naturaleza se horrorizará por causa de los hombres y pide venganza al cielo. Hay un clamor porque el hombre, en el curso de la vida, va destruyendo las cosas que hizo el Señor.

CLXXIX - Orad mucho para que sea más lenta la cólera de Dios y agradarlo en todo. Si una nación se pone en campaña de orar, Dios perdonará.

CLXXX - Un líquido amarillo acompañado de un enorme calor destruirá todos los seres vivos de distintas partes del mundo.