COLECCIÓN DE MENSAJES (41-60 )

XLI - Las mujeres deben ponerse velo en la cabeza al entrar a Misa y cuando reciban la Sagrada Comunión deberán taparse el cabello.

XLII - Yo te protegeré en todo. Siempre que veas que te hieren, reza el Rosario en mi nombre.

XLIII - Satanás, rey de la mentira y de la soberbia, trata de quitarle los hijos al Señor vuestro para llevarlos al infierno.

XLIV - Yo he venido al mundo a darle otra oportunidad al hombre para que estén preparados para la segunda venida de mi Hijo.

XLV - Yo soy la intercesora vuestra ante el Padre Todopoderoso.

XLVI - Mi manto protector os protegerá de las tentaciones. Hijitos predilectos, Yo estoy aquí para prepararlos para la segunda venida de mi Hijo. Alabad a Dios, hijitos míos, que nada os turbe en vuestra vida. Amad y tened paciencia porque la venida de mi Hijo está cercana. Amarse unos a otros como mi Hijo los amó. No mires el defecto de tu hermano, ámalo tal como es.

XLVII - Los sacerdotes, ministros de mi Hijo, deberán usar sotana y las religiosas deberán alargarse el hábito (1). En los conventos hay mucha revolución. Los consagrados a Dios ya no respetan a mi Hijo.

(1) - Santa Brigida (1303-1373) escribió: “Cuarenta años antes del año 2000, el demonio será dejado suelto por un tiempo para tentar a los hombres. Cuando todo parecerá perdido, Dios mismo de improviso, pondrá fin a toda maldad. La señal de estos eventos será: cuando los sacerdotes habrán dejado el hábito santo y se vestirán como la gente común, las mujeres como los hombres y los hombres como las mujeres”.

XLVIII - No tengas miedo de decir las cosas. Antes de irte al cielo debes purificarte y hacer cosas buenas, ayudar a tus hermanos sin mirar la clase que tengan de vida. De cierto te digo: si amas a tus hermanos y proteges al desamparado sin que nadie lo sepa, sin interés alguno, por amar a tus hermanos el Señor te premiará por tus actos buenos. Todos debéis hacer sacrificios por la conversión de muchas almas.

XLIX - Rezad el ángelus todos los días a las 12 y el Rosario en familia. Rezad por las conversiones y que todos crean en los sacramentos. Si el pueblo chileno no se atiene a la voluntad de Dios vendrán castigos y en esos momentos habrá que rezar el Rosario en la Iglesia o en la casa. Mi Corazón está abierto para todo el que quiera entrar. Me están ofendiendo mucho. Hay religiones que no me aceptan como Madre de Dios, pero algún día me aceptarán. Gloria al Padre del cielo y que reine la paz sobre todos los hogares de la tierra.

L - Mi Corazón Inmaculado se encuentra abierto de par en par para todos los que quieran entrar en él. El los conducirá al sendero que los llevará a Dios. LI - Dios va a agotar su cólera y va azotar el mundo con Rusia... Rusia será el azote del mundo por sus pecados, por sus blasfemias contra Dios. Quiero que mediten mis palabras: que haya más amor entre las familias, entre padres e hijos, marido y mujer, en todo el mundo. Muchos se turban y dicen “aquí no está la Madre de Dios” pero, pensad y meditad, si estuviese Satanás no daría mensajes para ir salvando vuestras almas.

LII - Hijitos míos, no os turbéis, ha llegado el tiempo de los tiempos y de cierto os digo: muchos perecerán si siguen así. El evangelio está escrito, ahí sale todo, pero he venido a salvar almas que van a la perdición. Hay odio, codicia, envidia, blasfemia contra Dios.

LIII - No crucifiquéis a mi Hijo, Vuestro Señor. Todos los días lo estáis crucificando.

LIV - Me he estado apareciendo en muchas partes y no se hace caso a mis mensajes; me niegan y ocultan muchas cosas que Yo he dicho. Ha llegado al colmo la soberbia de muchos sacerdotes. El que no crea que Yo estoy aquí, Yo no creeré que él está con mi Hijo, porque la palabra que Yo traigo es de mi Hijo.

LV - Muchos piden y nadie da. Deben pedir y dar y cosechar. Pidan con confianza porque se les dará. LVI - Recibid los santos sacramentos: la confesión y comunión. Media, o una hora adorad a Dios; en la comunión, el Pan de Vida.

LVII - Cada vez que recéis decid: Madre nuestra.

LVIII - El lobo siempre viene disfrazado de oveja. Reza mucho, mucho.

LIX - El hombre está cada día más soberbio, hay que rezar mucho para que haya paz y amor.

LX - Hijito mío, habrá que rezar muchos Rosarios por la conversión de los pecadores. Mira, hijito, te diré algo que aún no sabes: Ten mucho cuidado, camina lo más firme en tu vida porque muchos quieren hacerte confundir. Siempre reza el Rosario y haz sacrificios. El mundo no quiere entender: quiero que Estados Unidos sea consagrado a la Virgen María. Habrá que rezar mucho por Rusia, Estados Unidos y todos los pueblos. No quiero la perdición de vuestras almas.